TREPIDANTE PRIMERA PARTE. CONFORMISMO DE LOS DOS EQUIPOS PARA LOS PENALTYS. CR7, KAKA Y RAMOS FALLAN.
Rebosaban todos los ingredientes de un gran partido nada mas comenzar. Fueron unos primeros 45 minutos apasionantes, dignos de una semifinal de Champions. Ambos equipos buscaban el gol y atacaban a tumba abierta. Con las consecuencias que trae consigo para las defensas.
Apenas un cuarto de hora y Cristiano había marcado un par de goles. El primero tras un penalty involuntario, pero mano clara. El segundo firmado por Mourinho. El delantero luso finalizó bien ante Neuer tras una intercepción de Kedhira. Color de rosas para los blancos, pero antes de la media hora Mario Gómez forzó a Pepe a derribarlo ante un posible remate. No hizo falta forzarlo mucho pues el central tiene radar para estas acciones. Robben marcaba y se tomaba su particular revancha. Estuvo también muy impulsivo a lanzar cada libre directo. Las ocasiones se sucedieron hasta el pitido del descanso. El Madrid comenzó arrasando y acabó con un Bayern controlando la pelota.
Fué comenzar la segunda parte y apreciar que los temores de ambos equipos eran idénticos. No arriesgaron sabeedores de que ese resultado les mantenía vivos. El Madrid era quién mas podía perder debido al golaverage. Pero el hecho de jugar con los tuyos y exigir un poco mas de ambición, hizo ver un planteamiento excesivamente conservador. Con los equipos bien plantados sobre el césped era el equipo alemán quién mas criterio ponía con la pelota. Xabi Alonso y Kedhira no pudieron sostener bien el centro del campo. Se buscaba continuamente el uno contra uno de Robben y Ribery frente a sus respectivos laterales. Luiz Gustavo y Arbeloa acapararon faltas reiteradas, tantas como para dos expulsiones, pero solo obtuvieron una única amonestación.
Con el conformismo llegó la tanda. Esa que ni mucho menos es ninguna lotería, y refleja el estado físico y mental de cada jugador. Así como la confianza y seguridad de cada lanzador. Cristiano, Kaká y Ramos fallaron por el Madrid. Esto siempre deja a un portero como héroe. Iker paró dos de manera magistral, al igual que Neuer.
No se puede criticar la entrega merengue, pero quizás sí la ambición. La décima tendrá que seguir esperando.
Dani el Pulga
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