VALLADOLID 4-0 GIMNASTIC

Firme partido el que solventó el conjunto pucelano en el estadio José Zorrilla. Comenzó con algunas dudas, las cuáles regalaron un par de ocasiones claras al equipo tarraconense y que no supo aprovechar. Pero en cuanto apareció la figura de Óscar el partido pareció tocar la bozina del final, ya que en la primera parte consiguió un hat-trick que hechó por tierra la poca moral visitante. Ya en la segunda parte Javi Guerra se ocupó de adornar el resultado.

Y es que este Valladolid parece tener mimbres de primera, con un fútbol atractivo de toque, y un puñado de jugadores que bien valdrían para muchos de primera. Si Djuckic mantiene al equipo a este nivel debería estar en estos dos puestos que dan el billete para el viaje a primera. Dos centrales que intentan sacar siempre el balón jugado, bandas que castigan tanto con laterales cómo interiores, un nafti que hace de pulmón y sabe dónde entregarlo para no perderlo, un Óscar que sabe dirigir y llegar (Hoy lo demostró de sobra) y un delantero esperando su balón. Con estos mimbres se espera que sigan los buenos resultados que a llavado el equipo a encadenar una docena de partidos sin ser derrotado.
Y cuando los partidos se traban, parece tener oficios para solucionarlos por caminos mas feos. Aunque este partido no fué el caso. Ya que desde el principio quiso jugar el balón desde atrás hacia delante, y presionando las debilidades del Nástic, del cuál parecía tenerlas estudiadas. Y si encima tiene a uno de sus jugadores sembrado, cómo fué el caso de Óscar, es cuestión de jugar el partido para llevarse los tres puntos.