Partido de brega el ofrecido en El molinon entre los dos conjuntos. Con varias fases del encuentro en las que parecía que ambos conjuntos se encontraban a gusto, y que la diferencia técnica de los colchoneros no consiguió reflejarlo en el marcador.
Había expectativas puestas en la primera alineación de Clemente al frente del Sporting, que dejó como novedad mas sorprendente la de Pedro Orfila en el lateral derecho, ante la baja de Lora y la no convocatoria de Damián Suarez. Tambien estaba la de Adrián Colunga en la banda izquierda, pero esa novedad era mucho mas esperada. Fué este último el hombre de campo mas destacable del conjunto local, que ofreció desbordes hacia el centro y centros al área poco aostumbrados en Gijón. El Atlético tenía algo mas de posesión de balón, y se acercaba mas a la puerta contraria, pero faltaba llegada. Y en un balón que recibió el asturiano Adrián, la defensa rojiblanca se desorganizó, Gregory salió mal, tarde y sin hacer falta, lo que propició posteriormente el autogol de Canella en un mal despeje. El Atlético parecía haber abierto el melón, pero quizás pecó un poco de falta de ambición en cuanto buscar el segundo tanto. El Sporting buscaba constantemente la banda izquierda de Colunga y Canella, ya fuera por alto o por bajo. Y en una buena apertura hacia el primero, puso un balón peligroso en el área, que Botía piso mal, llegó a Eguren y este supo rematar. Posiblemente con una leve mano al controlar el esférico. Lejos del gol, parece que la estructura del equipo que ofrece Clemente le viene como anillo al dedo al jugador uruguayo, ya que parece responder a lo que pide el técnico para la posición de mediocentro.
Lo mejor del espectáculo llegaría en la segunda mitad. Comenzó con el Atlético intentando ir a por el partido, pero el Sporting aguantó sin mayores problemas. Entonces el encuentro entró en unos veinte minutos locos de correcalles. Ambos equipos replegaron, se crearon los espacios y tanto balón como jugadores aligeraban sobre el verde. Raro fué que en el intercambio de golpes no marcara ninguno de los dos equipos, principalmente los colchoneros. Que dispuso de varias ocasiones claras, sobretodo de falcao que pareció tener clemencia frente a Juan Pablo, que culminó una muy buena actuación.A falta de un cuarto de hora el cansancio hizo mella en los dos conjuntos. Los entrenadores movieron fichas y jugadores. Clemente metió a Rivera para tener mas balones largos, y despues a Trejo para aprovechar la rapidez y a Bilic por un fundido Barral, para poder bajar balones. Lejos de conseguirlo, pudo contener al rival con algo de toque y pases largos en cuanto se sentía presionado. Salvo en un par de ocasiones llevadas por las gambetas de Salvio que no tuvieron el fruto del gol.
Un punto para ambos que sabe mejor para el conjunto asturiano, y da algo de ánimo para futuros partidos. Queda la lectura mas que positiva de que el Sporting supo reaccionar tras el gol, algo que parecía carente en partidos de atrás. incluso cambió el esquema y el estilo acorde a lo que pedía el partido.
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