domingo, 15 de enero de 2012

UNA ESCALERA PARA IR SALIENDO DEL POZO

SPORTING 2-1 MÁLAGA

Peleada victoria la conseguida en el Molinon, en la que parecían escaparse dos trabajados puntos, y finalmente se consiguió una ansiada victoria. El partido fue pesado para el Málaga con la posesión del balón, pero controlado por el Sporting. Que ofrecía una defensa inédita con Canella, Gregory, el debutante del filial Gálvez y Damián, quien parece responder porque se intenta fichar un lateral en este mercado de invierno. Los centrales sportinguista cumplieron con la tarea. Dos jugadores de envergadura, con poderío fisico tanto por arriba como por abajo. Algo lentos quizás pero muy bien colocados sobre el césped del Molinón.
A pesar de que el dueño del balón era el Málaga, las pocas ocasiones que existían eran del Sporting. Y asi fué, en una falta lateral botada perfectamente con la técnica de Nacho Cases, fue rematada por Gálvez a las mallas, ligeramente en fuera de juego. Con el resultado a favor los rojiblancos dieron un paso atrás y se dedicaron a jugar con ventaja, algo poco visto esta temporada. Ya en la segunda mitad el conjunto andaluz jugaba constantemente en campo gijonés. Cazorla ordenaba todo el frente de ataque, e Isco intentaba gambetear para proporcionar ocasiones de gol. Aunque estas llegaban por parte del Sporting con contraataques mal llevados. Barral tuvo un partido muy activo, principalmente en la presión. Pero fué la entrada de Bilic la que aclaró las ideas de ataque, que incluso estuvo a punto de marcar. Pero fué Van Nistelroy quién con un previo aviso que aborto Gregory sobre la línea, marcó en su segunda ocasión de la que dispuso en el minuto 88.
Cuando la grada parecía marcharse sin el premio esperado y tan trabajado, el Sporting llevó la locura al estadio. Con el gol en contra el Sporting dió un pequeño pasito al frente, y dispuso de tres ocasiones, algo que hay que dar su valor. Y en la última de ellas, un buen pase entre líneas junto al bloqueo de Bilic, hizo que Trejo tuviera el espacio para controlar la pelota y volearla al palo contrario. Todo un golazo. Pero no se pudo soltar el aire hasta que el último disparo visitante salió cerca del palo derecho de Juan Pablo.
Importante victoria que deja buen sabor de boca, que no sirve para que el Sporting salga del agujero, pero si para subir un peldaño en la escalera hacia la salvación.

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