PUÑADOS DE TENSIÓN

Ya no es nerviosismo lo que se vive en el equipo rojiblanco. Ya se le puede llamar desesperación y hundición. Cagada tras cagada en los partidos de liga clave, la defecación se pasó ayer a la sala de prensa de la mano del siempre polémico Javier Clemente. Ofreciendo una pésima imagen del Sporting en un momento triste de la temporada. Pues la dolorosa derrota de este sábado aún escuece junto al realismo de la clasificación. Vale que el periodista de Onda Cero seguro que se pasó, y probablemente faltó al respeto en su columna. Pues clasificó los metodos del entrenador como caducos y trasnochadores.

Pero una pizca de inteligencia y control hubiera sido mejor. La actitud del periodista tampoco fué la mejor, ya que consiguió algo de lo que quería. Picar al de Barakaldo, y antes de que pusiera la chincheta este ya había saltado. Recriminarle así en rueda de prensa, ante cámaras y micrófonos, no hace mas que arrebatarle cualquier atisbo de razón que tuviera.
Actitudes como la de ayer sólo dejan a las claras el crónico momento que vive el sportinguismo. Pues cada uno de los rojiblancos somos conscientes de lo difícil de la situación, que se pinta prácticamente imposible. y si la situación ya es complicada de por si, con episodios como este solo hacen que la situación empeore.

Dani el Pulga